Miquel Navarro (Mislata, Valencia, 1945) pertenece a la generación de artistas españoles nacidos en torno a la década de los cuarenta que trabajan y desarrollan los nuevos preceptos de la escultura derivados de los movimientos neoconstructivista, minimalista y conceptual. Es, junto con Adolfo Schlosser (1939), Eva Lootz (1940) y Susana Solano (1946), uno de los miembros destacados de lo que se conoce como “Nueva Escultura Española”.
La exposición Monumentos y multitud, adopta el título de la última ciudad que el escultor ha creado. Se trata de una instalación de grandes dimensiones realizada en aluminio macizo, compuesta por centenares de piezas meticulosamente dispuestas y organizadas y que crean el tejido simbólico de una ciudad. Como en otras ciudades-instalación realizadas anteriormente
por Miquel Navarro, el artista no trata de representar una ciudad real ni ideal ni utópica, sino crear una ciudad poética, metáfora del mundo que nos rodea y de nosotros mismos.
Aunque es habitual que en las ciudades de Miquel Navarro el ser humano no aparezca representado y que no haya rastro de él —como era propio en los ambientes metafísicos de De Chirico—, sí que es parte indispensable como sujeto-espectador que termina de conformar la obra. Lo humano también aparece evocado a través de las sensaciones que se desprenden de la instalación Monumentos y Multitud. La frialdad, la incomunicación. El poder, la sumisión, la alineación. Sueños, deseos. El sexo. La sensación de drama y tensión se genera a partir de la compulsiva repetición de elementos y por el contraste de escalas, que no sólo añade ritmo a la composición, sino que también sitúa al espectador ante un paisaje donde el orden y el caos comparten un mismo espacio.
Junto a la ciudad Monumentos y multitud, la exposición constará de una treintena de esculturas: cuerpos, figuras, composiciones, objetos, paisajes y bodegones. Elaborados mediante formas geométricas ensambladas que acentúan la idea de construcción, de objeto situado entre la obra de arte y el artefacto. En estas obras aparecen evocados conceptos como el de síntesis de la naturaleza, figuración-abstracción, verticalidad-horizontalidad, unidad-multiplicidad y atemporalidad. En la reafirmación o no de estos conceptos, influye el material utilizado en cada caso: aluminio, hierro, terracota, zinc y ladrillo, así como la composición, el color y la escala. Miquel Navarro realizó su primera individual en la Galería Tassili (Oviedo)
en 1972. En los ochenta forma parte del grupo de artistas que expone en el Museo Guggenheim de Nueva York.
En 1986 le conceden el Premio Nacional de Artes Plásticas. Desde entonces la obra de Miquel Navarro se ha incorporado a los fondos de los más importantes museos y colecciones públicas como Solomon R. Guggenheim Museum, New York. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS), Madrid. Museo Nacional Centro de Arte Georges Pompidou, París. Museo de Arte Contemporáneo (MACBA), Barcelona. Instituto Valencia de Arte Moderno (IVAM), Valencia. Fundación Lambert, Bruselas, Bélgica. Museo Wilheim Lehmbruck, Duisburg, Alemania. Museo Wurth, Künzelsau, Alemania. Mie Prefectural Art Museum, Mie, Japón. Museo Vasco de Arte Contemporáneo (Artium), Vitoria. Museo de Arte Contemporáneo Patio Herreriano, Valladolid.